Es una Estrategia del sistema escolar, que nace a partir del Decreto 170/2009, y que tiene el propósito de contribuir al mejoramiento continuo de la calidad de la educación que se imparte en el establecimiento, favoreciendo la presencia en la sala de clases, la participación y el logro de los aprendizajes de todos y cada uno de las y los estudiantes, especialmente de aquellas y aquellos que presentan necesidades educativas especiales (NEE), sean estas de carácter permanente o transitorio.